7 aspectos positivos de la Revolución francesa

Aspectos positivos de la Revolución francesa:

1. El puebo se manifestó. El 14 de julio de 1798, el pueblo de París salió a las calles a manifestarse a favor de la Asamblea Nacional y tomó por a fuerza la fortaleza de la Bastilla un símbolo de la monarquía absolutista.

2. Estableció las bases del sistema democrático republicano. Tuvo como objetivo disolver el poder absolutista del rey y dividirlo en tres partes: el Poder Legislativo, Ejecutivo y Judicial.

3. Se firmó la Declaración de los derechos del hombre y del ciudadano. Documento firmado por la Asamblea Nacional Constituyente.

4. Surgió la burguesía, una nueva clase social. Se debilitó la estructura social feudal que regía desde la Edad Media, en la que un dueño de tierras o feudos explotaba sus terrenos a costa del trabajo de los vasallos, y surgió una nueva clase de comerciantes y profesionales que conformaron la burguesía.

5. Facilitó el acceso a la educación a la población en general. La difusión de conocimientos contribuyó a mejorar la calidad de vida de gran parte de la población que, hasta fin de la Edad Media se caracterizó por ser analfabeta.

6. Se estableció la libertad de prensa. La difusión de comunicados y noticias se diversificó y dejó de estar centralizada en la monarquía.

7. Se abolió de la esclavitud. Se inició un proceso social que dejó de considerar a ciertas personas como esclavos y siervos, al reconocer algunos de sus derechos.

8. Sentó las bases de la Ilustración o la “era de las luces”. Fue un movimiento cultural e intelectual que consideraba a la razón como la manera de explicar y comprender el mundo.

9. Surgió la enciclopedia. Se creó el primero documento enciclopédico que permitió difundir y hacer accesible los conocimientos a la mayoría de las personas.

10. Surgieron nuevos valores. Se defendieron los valores de la libertad, la igualdad y la fraternidad como lemas nacionales, al menos en la teoría, aunque en la práctica no fueron implementados de manera estricta.

La Revolución francesa (1789) fue uno de los enfrentamientos armados más violentos de la historia de tipo social y político en el que se enfrentaron dos grupos: la nobleza y el clero de la monarquía absolutista contra los burgueses, que lucharon por sus derechos y conformaron una nueva clase social con cierto capital que les permitía hacer negocios.