¿Qué es la flexibilidad y un ejemplo?

La flexibilidad es la capacidad de una articulación del cuerpo para realizar un movimiento con amplitud y soltura. Esta capacidad depende tanto del tipo de articulación como de la posibilidad de estiramiento de los músculos que participan en el movimiento. Por eso se dice que la flexibilidad es el resultado de sumar la movilidad articular junto con la elasticidad muscular.

Un ejemplo de flexibilidad es tocar la punta de los dedos de los pies con las manos sin flexionar las rodillas.

Estos son otros ejemplos de flexibilidad que resultan habituales en la vida cotidiana:

• Estirar el brazo hacia arriba y flexionar el codo para tocarse la espalda.
• Flexionar las rodillas para recoger algo que se ha caído.
• Sentarse sobre el piso con las piernas cruzadas.
• Extender el brazo para alcanzar un objeto en una alacena alta.
• Rotar el tronco hacia un lado cuando se está sentado en una silla.
• Hacer estiramiento de cuádriceps luego de correr.
• Extender ambos brazos hacia los costados y moverlos en círculos desde los hombros.
• Hacer rotar la cadera hacia un lado y hacia otro.
• Tocar el pecho con el mentón para estirar la parte posterior del cuello.
• Llevar la oreja derecha hacia el hombro derecho para estirar el lado izquierdo del cuello.

La flexibilidad es una de las denominadas capacidades físicas básicas, junto con la fuerza, la resistencia y la velocidad. Consiste en la capacidad de las articulaciones para moverse en posiciones diversas.

El desarrollo de la flexibilidad es fundamental para cualquier individuo que realice una actividad deportiva o que se dedique a la danza, pero también es necesario para el bienestar físico en general de todas las personas, incluso aquellas que no practican un deporte.

Cuando se ejercita la flexibilidad, se disminuye el riesgo de lesiones, aumenta la amplitud de los movimientos de las articulaciones, se alivian los dolores musculares, y se logra una mejor relajación y una recuperación más rápida luego del esfuerzo.