¿Qué perjuicios trae aparejado el hecho de no poseer educación para la prevención de enfermedades?

Algunos de los perjuicios que puede traer aparejado el hecho de no poseer educación para la prevención de enfermedades son los siguientes:

• Contraer enfermedades por desconocimiento de normas elementales de higiene, como el lavado de manos, el cepillado de dientes, el lavado de frutas y verduras, la cocción adecuada de alimentos, la conservación de alimentos, los beneficios de una alimentación equilibrada, etc. La mayoría de estas normas se enseñan en la escuela.
• Contraer infecciones de transmisión sexual u otras enfermedades infecciosas debido a ignorar los mecanismos de contagio de esas enfermedades y la importancia de mecanismos de prevención primaria, como el cumplimiento del calendario de vacunación Lo mismo que en el caso anterior, el desconocimiento pone en riesgo la salud de la persona y de quienes la rodean.
• Entre los contenidos de la educación se encuentra los conocimientos básicos acerca de la anatomía y la fisiología del cuerpo humano, que resultan de gran utilidad a la hora de reconocer los síntomas de enfermedades y comunicar la información a los profesionales de la salud. La falta de esos conocimientos puede hacer que se vuelva más ardua la labor de los médicos para diagnosticar correctamente una enfermedad.
• La educación ayuda en los casos en los que las personas pueden tomar decisiones acerca del tipo de tratamiento que desean recibir, pues les permite identificar las fuentes a las que acudir en busca de información y conocer las alternativas posibles.
• La falta de educación puede dificultar la comprensión de lo que se espera que un paciente haga luego de la consulta al médico; por ejemplo: saber en qué horarios y con qué restricciones debe tomar sus medicamentos, reconocer las condiciones en que debe presentarse para la realización de estudios (ayuno, toma de muestras), contactar a los profesionales indicados para la realización de cada estudio indicado.