¿Cuál es el rol estereotipado de una mujer en las familias?

Los roles estereotipados son patrones culturales arraigados que se reproducen entre generaciones dentro de una sociedad. Estos estereotipos se usan para calificar a las personas a partir de cuestiones convencionales, sin tener en cuenta sus particularidades y su individualidad.

En el caso de las mujeres dentro de la familia, hay funciones que muchas veces se dan por descontado como responsabilidades de ellas y que en realidad responden a estereotipos de género muy arraigados socialmente.

Entre estas funciones, podemos contar todas aquellas que sean tareas de cuidado, es decir, la alimentación, la asistencia frente a enfermedades de los miembros de la familia, el lavado de la ropa, la limpieza de la casa, entre las cuestiones más frecuentes.

Asimismo, las mujeres en las familias suelen hacerse cargo de muchas labores vinculadas con la crianza de los niños: las visitas a los médicos, la asistencia con las tareas escolares, las cuestiones vinculadas con la higiene, con los horarios, las actividades extraescolares y demás.

Si hubiera ancianos o personas que necesiten cuidados especiales en el hogar, estas tareas también suelen recaer en las figuras femeninas.

Todo esto implica que, dentro del rol estereotipado de las mujeres en la familia, también esté el hecho de ser la que se queda en casa a diferencia del hombre, que sale a trabajar y gana el sustento económico necesario para la subsistencia. En realidad, detrás de esto se esconde una cuestión mucho más profunda: una mujer nunca podrá formarse, perseguir un desafío profesional o estar trabajando varias horas fuera de su casa si tiene a su cargo todas las tareas familiares y domésticas que acabamos de mencionar.

Es por eso que, normalmente, los estereotipos suelen generar grandes desigualdades e injusticias entre las personas, por lo cual debemos evitarlos todo lo que podamos.