Tipos de atención

La atención es la cualidad perceptiva que tiene todo individuo y que actúa como filtro para los estímulos ambientales. Su tarea es evaluar los estímulos y darles prioridad a aquellos que considere más relevantes o necesarios para una situación determinada.

Los tipos de atención se pueden clasificar según diferentes criterios:

1) De acuerdo a los mecanismos utilizados por el individuo:

• Atención selectiva. Habilidad que tiene un individuo para responder ante una determinada situación o actividad y lograr apartar toda información del entorno que no resulte indispensable.

• Atención sostenida. Habilidad que tiene un individuo de llevar a cabo una determinada actividad durante un largo período de tiempo.

• Atención dividida. Habilidad que tiene un individuo de atender a por lo menos dos estímulos al mismo tiempo.

2) De acuerdo al nivel de control de la voluntad:

• Atención involuntaria. Capacidad de dirigirse hacia un objeto o situación sin intención ni ejerciendo ningún tipo de esfuerzo. Se caracteriza por ser emocional y pasiva, y no está vinculada con los motivos, necesidades o intereses inmediatos del individuo.

• Atención voluntaria. Capacidad de dirigirse de manera voluntaria hacia un objeto o estímulo. Se caracteriza por ser desarrollada a lo largo de la niñez, por medio del aprendizaje escolar y el lenguaje. La atención voluntaria se alcanza cuando se desarrolla la capacidad de señalar y nombrar objetos.

3) De acuerdo a los sentidos:

• Atención visual. Ocurre cuando un individuo elige dónde poner la atención dentro de un campo de estímulos visuales amplio.

• Atención auditiva. Ocurre cuando un individuo elige dónde poner la atención frente a un campo de estímulos sonoros amplio.

4) De acuerdo al origen de los estímulos:

• Atención interna. Ocurre cuando el individuo pone su atención en los estímulos, cambios o procesos que ocurren en su interior.

• Atención externa. Ocurre cuando el individuo pone su atención en los estímulos, cambios o procesos que provienen del entorno.

5) De acuerdo a la disposición del individuo:

• Atención abierta. Ocurre cuando la atención se acompaña con gestos o movimientos.

• Atención encubierta. Ocurre cuando la atención no se condice con la disposición física del individuo.