Tipos de residuos

Los residuos son desechos que se generan a diario tanto en los hogares como en industrias, organizaciones y oficinas. Estos productos, que pueden ser sólidos, líquidos o gaseosos, en general no poseen valor por falta de tecnología rentable para su reutilización o porque no existe un mercado estable que los demande. La cantidad de residuos que genera una comunidad aumenta con el número de habitantes, el desarrollo industrial y el crecimiento económico.

La acumulación de residuos impacta de manera negativa en el medio ambiente por lo que las poblaciones intentan desarrollar una gestión de los residuos, que es la planificación fundada de lo que se debe hacer con los residuos a medida que aparecen en el ecosistema.

Los residuos se pueden clasificar según su estado físico en: sólidos, líquidos, gaseosos y por su actividad una vez que ingresan al ecosistema en inertes, activos, radiactivos. Además, según su origen, los residuos pueden ser primarios, secundarios o terciarios:

1) Residuos de origen primario. Son los que se generan durante actividades productivas básicas de aprovechamiento de recursos naturales; algunos ejemplos son: agropecuarios (estiércol, bagazo), forestales (no se deben acumular por el riesgo de incendio), mineros (metales pesados) o asociados a la extracción de petróleo.

2) Residuos de origen secundario. Son los que se generan durante la fabricación de alimentos, artículos de consumo cotidiano, electrodomésticos o en procesos específicos. Se dividen en dos categorías básicas:

• Residuos industriales. Se originan en los procesos de producción de bienes y servicios. Pueden ser:

a. Residuos inertes. Son los que no sufren transformaciones físicas, químicas o biológicas significativas. No son solubles, ni combustibles, ni reaccionan entre sí (ni con los componentes del entorno), por lo que no afectan a otras materias con las cuales pueden tomar contacto. Por ejemplo: vidrio, escombros.

b. Residuos asimilados a residuos urbanos. Algunos ejemplos son el papel, el cartón y los plásticos.

c. Tóxicos y peligrosos (RTP). Pueden ser inflamables, explosivos, corrosivos, tóxicos (como pinturas o disolventes), metales pesados o reactivos (productos que reaccionan con otros, a veces de manera violenta).

• Residuos radiactivos. Se originan en centrales nucleares y en las instalaciones en las que se utilizan materiales radioactivos con distintos fines, como plantas de tratamiento de minerales de uranio. También se generan en actividades de investigación.

3) Residuos de origen terciario: Son los que se generan en ambientes domésticos y en la actividad comercial. Pueden ser;

• Residuos sanitarios o clínicos. Son los originados en instalaciones sanitarias como hospitales, clínicas, centros de salud; algunos pueden entrañar gran peligrosidad. Se incluyen en esta categoría residuos de tres clases: no infecciosos (sondas o vendas), infecciosos (agujas o elementos contaminados con sangre u orina) y químicos y farmacológicos.

• Residuos sólidos urbanos (RSU). Son los que se generan en los hogares (residuos domiciliarios), en las vías urbanas, las zonas verdes y recreativas, los sitios con obras en construcción o de demolición; también muebles y enseres desechados, vehículos abandonados. Como se ve, son muy heterogéneos. A grandes rasgos, implican las siguientes cuatro categorías: orgánicos (alrededor del 48-50% del volumen), papel (20%), vidrio (8%), plástico (8%), otros (metales, textil, etc.). Los orgánicos (restos de comida, frutas y verduras, carne) son los más biodegradables. Los demás son de descomposición más lenta o prácticamente nula, lo que entraña diversos riesgos medioambientales.