3 consecuencias del crecimiento desmesurado de las ciudades

Las 3 principales consecuencias del crecimiento desmesurado de las ciudades son:

• CONTAMINACIÓN La contaminación ambiental, del suelo (por la gran acumulación de residuos sin procesar), del agua de las napas subterráneas y demás afluentes cercanos a la ciudad como consecuencia de la basura y los desechos industriales) y del aire (por la emanación de gases tóxicos del transporte y de las industrias).

• POBLACIÓN NUMEROSA El aumento de la población es más acelerado de lo que pueden hacerlo los servicios y la infraestructura que requieren para satisfacer las necesidades y llevar una vida digna, como el acceso a agua potable, alumbrado público, recolección de residuos, entre otros.

• ALTERACIÓN DEL ECOSISTEMA

  El deterioro del medio ambiente natural como consecuencia de la construcción de carreteras, vías de ferrocarril y grandes centros urbanos. Además, se crean zonas marginales alrededor de las grandes ciudades que implican extensiones de viviendas precarias realizadas sin ningún tipo de planificación o capacidad de cuidar el medio ambiente, afectando la vida de las especies animales y vegetales autóctonas.

Existen diversas consecuencias del crecimiento urbano, en especial, cuando se produce de manera desmesurada. La particularidad de que el crecimiento sea excesivo puede ser motivado por inversionistas que pretenden generar ganancias a través de la construcción y venta de edificios destinados a la vivienda y al comercio. Se prioriza la obtención de ganancias a costa del desarrollo urbano que, en algunos casos, se lleva a cabo a pesar de contradecir la legislación vigente por actos de corrupción con los municipios. El crecimiento urbano desmesurado no permite planificar lugares adecuados y placenteros para la vida en sociedad, sino que genera ganancias para unos pocos a cambio de la no calidad de vida para la mayoría que terminan viviendo en esos centros urbanos.